¿Qué es la nube hibrida?

La nube híbrida es una solución que combina una nube privada con uno o más servicios de nube pública, con software propietario que permite la comunicación entre cada servicio distinto. Una estrategia de nube híbrida proporciona a las empresas una mayor flexibilidad al mover cargas de trabajo entre soluciones de nube a medida que fluctúan las necesidades y los costos.
Los servicios de nube híbrida son poderosos porque brindan a las empresas un mayor control sobre sus datos privados. Una organización puede almacenar datos confidenciales en una nube privada o en un centro de datos local y, al mismo tiempo, aprovechar los sólidos recursos informáticos de una nube pública administrada . Una nube híbrida se basa en un solo plano de administración, a diferencia de una estrategia de múltiples nubes en la que los administradores deben administrar cada entorno de nube por separado.
Arquitectura de nube híbrida
La gestión uniforme de los recursos de la nube pública y privada es preferible a la gestión individual de los entornos de la nube porque al hacerlo se reduce la probabilidad de que se produzcan redundancias en los procesos. Los entornos administrados por separado aumentan el riesgo de lagunas de seguridad si cada solución no está completamente optimizada para trabajar con las demás.
Las mejores prácticas de arquitectura híbrida eliminan muchos riesgos de seguridad al limitar la exposición de datos privados a la nube pública.
La infraestructura de nube híbrida generalmente incluye una plataforma de infraestructura pública como servicio (IaaS), una nube privada o un centro de datos y acceso a una red segura. Muchos modelos híbridos aprovechan las redes de área local (LAN) y las redes de área amplia (WAN).
Las empresas que adoptan una estrategia híbrida generalmente comienzan con una solución IaaS y extienden las funcionalidades a la nube privada. Para implementar una estrategia híbrida de manera efectiva, las nubes públicas y privadas deben ser compatibles entre sí para que puedan comunicarse. En muchos casos, la nube privada está construida para ser compatible con la solución pública.
En los últimos años, los proveedores de IaaS como Amazon, Google y Microsoft han facilitado que las empresas conecten sus recursos locales a una solución de nube pública. Las interfaces de programación de aplicaciones (API) mejoran la interoperabilidad nativa entre servicios. Además, los arquitectos híbridos pueden implementar una capa de hipervisor para generar máquinas virtuales que se conectan a la nube pública a través de otra capa de software responsable de la orquestación entre los entornos de nube.
Beneficios de la nube híbrida
La mayoría de las empresas no utilizan el mismo nivel de potencia de cálculo todos los días. De hecho, una organización puede encontrar que sus recursos solo necesitan aumentar durante una época específica del año. Por ejemplo, una aplicación de seguro médico puede necesitar el doble de potencia informática durante la inscripción abierta. En lugar de pagar para que esos recursos adicionales permanezcan inactivos durante la mayor parte del año, una organización puede ahorrar en costos al extender sus recursos privados a una nube pública solo cuando sea necesario.
Un modelo híbrido requiere mucho menos espacio en las instalaciones en comparación con un modelo estrictamente privado. Una empresa puede implementar una red privada en el sitio para manejar las necesidades internas y luego extenderse automáticamente a la nube privada cuando los recursos computacionales superan la disponibilidad local. Este modelo puede beneficiar a las nuevas empresas que no pueden permitirse invertir en un enorme centro de datos privado, así como a las empresas establecidas que necesitan escalar de manera rentable.
¿Quién usa la nube híbrida?
Las empresas de todo el espectro de industrias se han movido hacia soluciones híbridas para reducir costos y presionar los recursos locales. Desde el sector financiero hasta la industria del cuidado de la salud, los entornos de nube híbrida han demostrado ser efectivos no solo para mejorar la potencia informática y de almacenamiento, sino también para optimizar el recurso escaso del espacio físico. Muchas organizaciones simplemente no tienen espacio disponible para implementar servidores en el sitio.
En el espacio de la atención médica, la privacidad de los datos es primordial y faltan recursos informáticos privados. Un modelo de nube híbrida es una solución ideal porque permite que los grupos médicos retengan los datos de los pacientes en un servidor privado seguro y, al mismo tiempo, aprovechan la potencia computacional avanzada de un modelo IaaS público. En pocas palabras, cualquier industria que se beneficie de las aplicaciones de nube pública también puede beneficiarse del modelo híbrido.